PARA QUE NO TE VAYAS


Llegaré a ese lugar antes que te vayas
Y recogeré el latido de tu corazón a través de tu mirada.

Recogeré en tu piel aún salobre las ansias bañadas por estrellas llenándome de luz hasta que pueda..

Antes que te vayas escribiré en tu piel las ansias de mis dedos
De mis noches sin ti, de los silencios y mis miedos;
de las cosas que dije entre dormido con la ausencia cargada de esperanzas.

Te dejaré marcadas las caricias soñadas entre lunas
cuando mis labios besaban las almohadas,
te dejaré marcadas las pasiones y ternuras
mientras soñaba tu cuerpo siempre a oscuras.

No dejaré que te vayas sin mis besos,
que se humedezcan también tus pensamientos
Con el abrazo reprimido que llevo en tanto tiempo.

Antes que te vayas robaré con mis manos tus caderas
Y me llenare de aromas con el roce sutil del vientre tuyo
Me quedaré con tu sonrisa y tus espasmos que en la brisa
cantarán como un arrullo.

Ya no habrá mas esperas porque todo, todo será mío.
Tus ansias, tus quejidos, tus labios, tus latidos,
Tu pensar jugando entre mis sienes ,
Tu voz confundida con mi aliento,
Tus manos enredadas con mis manos
Y tu alma no será tu alma, será mi pensamiento.

Recibe un beso en tu alma.

SIEMPRE SERA LA AURORA


Siempre será la aurora testigo de noches insepultas,
de palabras que pasan al olvido,
de prisiones en pechos compungidos y de almas buenas cuando el día repunta.

La aurora también limpia oscuros sentimientos, sacude el polvo de palabras vanas,
de las cosas que fueron como un cuento y el agrio amor con que se ama.

La aurora arroja al viento secretos nocturnales,
de pasiones, de silencios y dolores,
de palabras que fueron en la noche tópicos de amor y de clamores.

Siempre será la aurora la dulce espina que hace sangrar la dulce herida,
la que lleva el sabor de un tierno roce y el dulce amor de mirar como me miras.

Será la aurora la que siembre el paisaje de amor en tus pupilas,
en las ansias benditas de unas bocas y el dulce mal de tus heridas.

Recibe un beso en tu alma.

Como si hubiese muerto

Las calles están solas, todas las puertas cerradas y el viento sopla fuerte silbando en los cristales. Parece que no hay nadie, la noche llega y en la tarde casi oscura,
mis pasos se apresuran buscando algún refugio en tantas soledades.
No hay luces en las casas, no hay luces en la calle, no hay ruidos, no hay llantos, la ciudad quedó oscura y callada.
El viento cesó y comenzó el silencio, un silencio plano y afónico como en el mundo de los muertos.

Es tarde, estoy cansado, y sin embargo el sueño no llega.
Estoy en una plaza con plantas y con flores, sin viento sin ruidos, sin olores.
El cielo oscuro no deja ver estrellas y siento que mi alma se ha quedado sola;
Por que! por que te fuiste sin decirme nada? sin dejar que te viese, sin verme en tu mirada?

Sin ti no puedo proseguir, todo se nubla y todo es nada. No brillan las estrellas, no hay fuentes ni riachuelos, ni voces en el puente, ni luces en las casas, ni flores con olores.
Todo está opaco, siniestro , sumergido; Y como tu no estás, yo seguiré viviendo en este olvido.

Besos para tu alma.